Las actividades de un director

Una empresa comprometida tiene un director comprometido, aquel que tiene la experiencia labrada por medio del carácter templado como la espada, no estoy hablando de algo trivial que se consigue en la universidad o en los primeros años de trabajo, es algo que se consigue cuando el futuro director se educa en la adversidad, en el dolor, en la humildad, en el intelecto, este es un verdadero director (ya sea de una vida, de una familia o una empresa), un hombre o una mujer de verdad.
Una vez que se tiene lo más importante, una persona comprometida con algo más allá de lo superficial, en caso de que no lo supiera a esas alturas, debería de saber que sus actividades, nada fáciles, serán:
Diagnóstico: Ver la situación clara de las personas y por ende de la empresa.
Se requiere: Objetividad y humildad.
Decisión: Determinar la meta a la cual se va a llegar.
Se requiere: Magnanimidad y audacia.
Mando y ejecución: Impulsar e inspirar a las personas para alcanzar la meta.
Se requiere: Constancia, confianza y fortaleza.