Para madurar y no terminar amargado (El sentido del dolor).

"Cuando hay un  proyecto de vida coherente y edificado, el dolor, el sufrimiento, la decepción, la humillación, el fracaso…tienen sentido. ¿por qué?, ¿de que manera?.
El sufrimiento en sus diversas formas, cura al hombre de su profunda soberbia, y lo va volviendo más amoroso con los demás. A la corta lo frena; pero, a la larga lo hace más humano, comprensivo y tolerante.
Cuando estos impactos negativos recibidos así, el hombre se neurotiza y se torna agrio, amargado, resentido, echado a perder…
El mismo sufrimiento hace madurar a unos conduce a otros a uno de los peores capítulos de la psiquiatría: la personalidad enferma. 
La diferencia está en el modo de aceptarlo en el contexto del proyecto personal".

Enrique Rojas.
Catedrático de Psiquiatría de la Universidad Complutense de Madrid y director del Instituto Español de Investigaciones Psiquiátricas.
Premio Conde de Cartagena de la Real Academia de medicina de madrid, por sus investigaciones sobre la depresión, y médico humanista del año en España (1995)


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